Una cierva era perseguida por unos cazadores y se refugio bajo una viña. Pasaron cerca los cazadores, y la cierva, creyéndose muy bien escondida, empezó a saborear las hojas de la viña que la cubría. Viendo los cazadores que las hojas se movían, pensaron muy acertadamente, que allí adentro había un animal oculto, y disparando sus flechas hirieron mortalmente a la cierva. Ésta, viéndose morir, pronunció estas palabras:
-- ¡ Me lo he merecido, pues no debí haber maltratado a quien me estaba salvando !
Moraleja: Sé siempre agradecido con quien generosamente te da la ayuda para salir adelante.
Esta fabula nos trata de decir que debemos siempre agradecerle a quien nos extiende la mano, nunca sabemos cuando esta nos faltara.
Fuente: http://edyd.com/Fabulas/Esopo/E102CiervaVina.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta tus pensamientos de la entrada, tus quejas y sugerencias. Todo en el blog vale, ¡gracias por comentar!