Trata de un niño llamado Anton que conocío a un pequeño Vampiro llamado Rüdiger, el cual era simpático y humilde. Al comienzo para el niño fue muy extraño aunque el Vampiro estuviera calmado y no tuviera intenciones de atacarlo ni chuparle su sangre.Cuando ya se hicieron lo bastante amigos acordaron en visitarse todos los sábados en la noche. En uno de esos sábados Rüdiger llevó una manta para ir volando junto a Anton a la cripta del cementerio, mejor dicho, su casa. Allá estaba su hermana, la cual se enamoró de Anton por los seguidos comentarios que hacía Rudiger de él.
La aventura recién comenzaba para estos amigos, incorporando a otros humanos y vampiros, pero, ¿Hasta donde llegará la amistad?Este libro lo leí cuando iba en 5º basico y aún recuerdo algo de él. Aunque no fue de mi agrado la redacción, me gustó la trama de la historia. Encuentro que es una buena lectura para aquellos que les gusten las historias fantásticas.
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