Mejor que comida de lujo.

 Esta obra dramática la escribí yo en una prueba del genero dramático:

Personajes: Doña Clara.
                  Dorotea (hija de doña clara).
                  Srta. Catalina.
                  Sr. Eduardo.
                  Mozo.

(La obra se sitúa en un lujoso restaurante de comida italiana en una agradable tarde, adentro del local se ve mucha gente y solo una meza disponible, por lo cual el mozo espera afuera a un cliente)

(Entra Doña Clara con Dorotea).

Doña clara: Te invito Dorotea, aquí nos comeremos una buena comida.
Dorotea: Pero mama, este es un restaurante lujoso, nos quedaremos sin plata si comemos aquí.
Doña Clara: Tú no te preocupes que plata no nos hace falta para comer. (Al mozo), ¡Eh! mozo, somos clientas.
Mozo: No será posible que entren, la comida termino y yo estoy afuera anunciando de ello.
Doña Clara: Perdón, pero me doy cuenta que me estay mintiendo porque de aquí se puede ver como el Cocinero saca y saca alimentos.
Mozo: Lo siento, pero las mezas están todas ocupadas.
Dorotea: Aquí veo que ahí hay una meza sola.
Mozo: (Alterado), ¡Entienda! esa meza esta reservada.
Dorotea: ¡Es usted un mentiroso!

(Entra Srta. Catalina junto al Sr. Eduardo).

Srta. Catalina: (Mira adentro del local), Eduardo, solo queda una meza, y las presentes damas ocuparan la meza disponible. ¿Que haremos?

(El mozo pone atención a la pareja)

Sr. Eduardo: Tienes la bendita razón Catalina, me apena que debemos comer en otro restaurante, pero vamos, llamare al taxi para retirarnos.
Mozo: No se preocupe, estas damas son solo vendedoras ambulantes, deme su abrigo dama, y por favor, gusten en pasar.
Sra. Catalina: Mira Eduardo, glorioso día de suerte (le entrega el abrigo al mozo).
Doña Clara: Pe...¡Pero usted dijo que no habían mezas disponibles!
Mozo: No señora, usted no puede comercializar sus productos aquí en el local.
Sra. Catalina: Lamento que no pueda comercializar aquí, pero si necesita, tome. (Saca un billete de $10.000 de su cartera y se lo entrega cuidadosamente a Doña Clara, luego entra al local con el mozo que permanece asombrado).

Dorotea: ¡Madre mía! mira que billete nos dio esa mujer mamá.
Doña Clara: Esto es mucho más que el sueldo de ese mozo desquiciado, vamos nos tomaremos un helado.

(Salen).